Gatorade Maratón de Santiago: La fiesta del deporte ya tiene ganadores
El Gatorade Maratón de Santiago, un evento que une corazones, desafía límites y celebra el espíritu deportivo, llegó a su decimosexta edición con una energía imparable y una pasión que llenó las calles de nuestra querida ciudad. Bajo un cielo generoso y un clima perfecto para correr, miles de atletas se lanzaron a las calles con determinación y coraje, transformando cada zancada en un símbolo de resiliencia y superación.
En un día que quedará marcado en la memoria de todos los presentes, nos emociona anunciar a los campeones de esta edición histórica del Gatorade Maratón de Santiago. Estos valientes deportistas han demostrado un compromiso inquebrantable con sus metas, y su dedicación ha dado frutos en forma de victoria.
En la categoría de 42 kilómetros, los ganadores masculino y femenino han establecido un nuevo estándar de excelencia. Con tiempos impresionantes que reflejan su dedicación y entrenamiento, sus nombres resonarán en los anales de la historia de esta competición.
El primer lugar se lo llevó el Keniata, Edwin Kibet, con un tiempo de 2 horas, 10 minutos y 18 segundos. Por parte de las mujeres, la también Kenista, Josephine Chepkoech logró la hazaña en 2 horas, 30 minutos y 15 segundos.
En la prueba de medio maratón, el espíritu de resistencia y determinación brilló con aún más fuerza. Los ganadores de esta desafiante distancia han dejado una marca imborrable en la historia del Gatorade Maratón de Santiago.
El primero en llegar fue Carlos Diaz, que marcó un tiempo de 1 hora, 3 minutos y 24 segundos. La primera en llegar a la meta de los 21K fue María José Calfilaf Rodriguez, con 1 hora, 18 minutos y 15 segundos.
Por último, pero no menos importante, en la categoría de 10 kilómetros, la velocidad y la agilidad fueron puestas a prueba, y los ganadores fueron Diego Uribe en primer lugar con 29 minutos, y 44 segundos. Y Paulina Saavedra, con un tiempo de 35 minutos y 45 segundos.
Este año, el Gatorade Maratón de Santiago no solo ha sido una carrera, sino una experiencia colectiva de determinación, compañerismo y superación personal. Cada corredor que cruzó la línea de meta es un campeón en su propio derecho, y cada espectador que animó desde las aceras es un héroe que alimentó el fuego de la pasión.